Situada en el extremo norte de la provincia de Jaén, Santa Elena es el primer municipio que recibe al viajero al cruzar Despeñaperros por la Autovía A-4. Esta localidad es mucho más que un punto de paso; su historia, su riqueza natural y sus tradiciones la convierten en un destino singular dentro de las Nuevas Poblaciones fundadas por Carlos III en el siglo XVIII.
Santa Elena y la historia de las Nuevas Poblaciones
Santa Elena fue una de las colonias establecidas por Carlos III dentro del proyecto ilustrado de repoblación de Sierra Morena. Sin embargo, su historia se remonta mucho más atrás, pues este enclave fue testigo de la mítica Batalla de las Navas de Tolosa en 1212, un episodio crucial en la Reconquista que marcó el destino de la península.
El municipio cuenta con el Centro de Interpretación de la Batalla de las Navas de Tolosa, un espacio donde el visitante puede conocer en detalle los acontecimientos que tuvieron lugar en estos campos hace más de 800 años. A poca distancia, los restos del campo de batalla invitan a imaginar la magnitud de aquel enfrentamiento entre los ejércitos cristianos y musulmanes.
Despeñaperros: el gran atractivo natural
El Parque Natural de Despeñaperros ocupa la parte norte del término municipal de Santa Elena y es uno de los espacios protegidos más fascinantes de Andalucía. Este paraje, caracterizado por su relieve abrupto y su enorme valor geológico, es el lugar ideal para el turismo activo y el contacto con la naturaleza.
Dentro del parque, destacan lugares como Los Órganos, un espectacular conjunto de formaciones rocosas declarado Monumento Natural de Andalucía. Además, el Santuario Ibérico del Collado de los Jardines permite conocer la huella de las antiguas civilizaciones que habitaron estas tierras mucho antes de la llegada de los colonos centroeuropeos.
Los amantes del senderismo pueden recorrer rutas como la que lleva hasta el Salto del Fraile, una impresionante cascada, o la senda que atraviesa los desfiladeros de Despeñaperros, ofreciendo vistas panorámicas inolvidables.
El Centro de Visitantes del Parque Natural es un punto de referencia para quienes desean explorar Despeñaperros, proporcionando información detallada sobre rutas, flora y fauna. Además, colegios y grupos de estudiantes encuentran en Santa Elena un destino educativo de gran interés, combinando historia y naturaleza en una misma visita.
Fiestas y tradiciones con esencia europea y andaluza
Las fiestas patronales de Santa Elena se celebran el 18 de agosto, en honor a la santa que da nombre al municipio. A diferencia de otras Nuevas Poblaciones, su patrona no es la Inmaculada Concepción, sino Santa Elena, en cuyo honor se erigió una ermita tras la Batalla de las Navas de Tolosa.
Una de las tradiciones más singulares de Santa Elena es el Rulahuevos, una costumbre heredada de los colonos alemanes y suizos que consiste en pintar huevos cocidos y hacerlos rodar por la hierba en el paraje de La Aliseda durante el Domingo de Resurrección. Esta práctica, compartida con otras Nuevas Poblaciones, es un vestigio del legado centroeuropeo en la región.
Otras festividades destacadas incluyen la Romería de San Isidro en mayo, donde los vecinos trasladan la imagen del santo hasta La Aliseda en carrozas decoradas, y la festividad de San Antón, en la que antaño se encendían hogueras y se bendecían roscas en la iglesia para proteger a los animales del campo.
Gastronomía: tradición y sabor en Santa Elena
Santa Elena ofrece una gastronomía rica en productos locales y platos con historia. Uno de los más emblemáticos es la tortilla Alfonso XIII, un manjar, preparado con jamón, champiñones, trufa y riñones de cordero, fue creado en los años veinte en honor al rey Alfonso XIII durante una visita a la zona.
Los productos de caza son protagonistas en la cocina de Santa Elena, con platos como el guiso de ciervo, la perdiz en escabeche o los andrajos con liebre. La repostería también tiene su lugar con dulces tradicionales como las flores, los pestiños y las gachas dulces con tostones, muy típicas en la festividad de Todos los Santos.
Artesanía: tradición en madera, hierro y cerámica
La artesanía en Santa Elena mantiene vivas técnicas ancestrales. Destacan la carpintería artística y la talla en madera, trabajos que han pasado de generación en generación en talleres familiares. También es importante la artesanía en hierro forjado y taxidermia, reflejando la relación del municipio con la caza y la naturaleza.
En el pasado, la localidad también fue un importante centro de cerámica hispano-árabe, utilizando la técnica de la cuerda seca para elaborar piezas que se exportaban a distintos puntos del país.
